Este rosal vigoroso y erguido es muy buen trepador, tanto por su belleza como por su rendimiento. Produce agradables cogollos de color limón pálido en forma de copa que se abren gradualmente en grandes flores de color blanco cremoso, cuyos pétalos exteriores están cuidadosamente dispuestos en círculos concéntricos.
Tienen un fuerte aroma a mirra con toques de reina de los prados, vainilla y heliotropo. El crecimiento es fuerte y particularmente saludable, y está vestido con un follaje verde bastante apagado.